Llegó el fin de semana más esperado para los fans de Madonna, pues este sábado arrancó su gira de conciertos para celebrar 40 años de trayectoria. La incombustible Madonna arrancará este sábado en Londres su esperada nueva gira mundial, ‘The Celebration Tour’, que ha despertado una enorme expectación, con el primero de los cuatro conciertos del tramo europeo previstos en la capital británica.
Si de marcar tendencia y reinventarse se trata, Madonna es toda una experta. Y es que con su primer concierto de su gira mundial, la cantante nos ha dejado unos lookazos dignos para una reina… ¡La Reina del Pop!.
De manera casi poética, Madonna arranca su show con ‘Nothing Really Matters’, donde la vemos ataviada en un vestido negro con dramáticas mangas largas (que además incluyen detalles cut-outs), guantes de encaje y una caprichosa corona de cristales.
Acompañada de un repertorio de clásicos ochenteros —’Everybody’, ‘Into the Groove’, ‘Burning Up’, ‘Open Your Heart’, ‘Holiday’ y ‘Live to Tell’— Madonna lució como a inicios de su carrera con un corsé y minifalda, cortesía de Vetements.
El tercer atuendo de la noche se trata de un básico en el guardarropa de Madonna: una túnica negra. para interpretar (obviamente) ‘Like a Prayer‘.
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Para el momento más ardiente de la noche, Madonna necesito solamente de un simple slip dress para estremecer a su público al ritmo de clásicos como ‘Erotica’ o ‘Hung Up’.
Strike a pose! Madonna demostró que está más viva que nunca al momento de interpretar ‘Vogue’ en donde resucitó el escandaloso e icónico cone-bra de Jean-Paul Gaultier.
Más adelante en el programa, Madonna canalizó a su chica americana interior con un dinámico baile con ‘Don’t Tell Me’, e interpretaciones acústicas de ‘I Will Survive’ y ‘La Isla Bonita’, todo esto al puro estilo del viejo oeste (botas vaqueras incluidas).
Antes de despedirse del público, Madonna interpreta ‘Bedtime Story’ y ‘Ray of Light’ luciendo increíble con un catsuit de espejo. Para un poco más tarde regresar al dramatismo con una capa de mangas abullonadas para ‘Rain’.
Como toda una virgen, Madonna cerró con ‘Like a Virgin’, ‘Bitch I’m Madonna’ y ‘Celebration’ con este osado atuendo.
