La noche no ha hecho más que empezar y, sin embargo, ya hemos perdido el aliento en más de una ocasión. ¿La culpable del último sofoco? Rosalía, que para esta Met Gala 2025 se ha decantado por convertirse en un maniquí viviente.
La Motomami nunca deja indiferente a nadie con sus looks y, no te lo voy a negar, era una de las llegadas más esperadas. Y no ha defraudado para nada. La catalana se ha enfundado en un escultural vestido blanco de Balmain y ha acaparado todas las miradas de las escaleras del Metropolitan Museum de Nueva York.
Firmado por Olivier Rousteing y esculpido sobre el cuerpo de la cantante, este vestido se trata de un diseño que no solo se ha ajustado a la perfección al tema de la gala de este año, “Tailored for You”, sino que ha conseguido escribir un nuevo capítulo en el libro de estilo de Rosalía. Su silueta estricta y ceñida creaba una encantadora figura de reloj de arena que se fundía con una falda vaporosa que rozaba el suelo.
El original diseño evocaba las raíces de la Alta Costura, al emular la imagen del lienzo del taller de la casa de modas parisina: el maniquí de Stockman, una hoja en blanco para la sastrería y la creatividad del diseñador.
Para contrastar con el carácter minimalista de su vestido, Rosalía lució un delineador de ojos negro intenso y un peinado alisado, casi mojado. A juego con el vestido, también lució una manicura blanca lechosa.
La Rosalía volvió a demostrar que es una de las figuras de referencia en el sector de la moda, capaz de despuntar en una de las fechas por excelencia de la industria.