Una de las películas de terror más subestimadas de la historia es ‘The Orphan’, título que nos regaló el director español Jaume Collet-Serra junto a Warner Bros y Dark Castle en 2009 y que ha llegado a tener una recaudación de $78 millones de dólares a nivel mundial. Ahora, 13 años después, Isabelle Fuhrman retomó su papel como Esther/Leena Klammer de la mano del director William Brent Bell (The Boy).
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Fuhrman tiene 25 años en la actualidad, por lo que hacerla pasar por una niña no ha sido tarea fácil. Gracias a profesionales del maquillaje y uno que otro ingenioso truco de Hollywood, la actriz volvió a lucir como una niña.
Doug Morrow (Curse of Chucky y Ghostland) se desempeñó como jefe del departamento de maquillaje y artista de efectos especiales de maquillaje para la película, colaborando estrechamente con su asistente Kristy Greig (Channel Zero y Run) y otros departamentos, incluidos los de cámara, efectos e incluso vestuario para pasar los años, principalmente apoyándose en las técnicas de la vieja escuela de Hollywood.
Como Fuhrman todavía tiene un aspecto juvenil en su rostro, se redujo a redondear algunas de sus características con técnicas que, según Morrow, son “tan antiguas como el maquillaje”.
Morrow explicó “Ella tiene una gran piel, excelentes rasgos, excelentes cejas y excelentes pestañas, por lo que se trataba más de enfatizar lo que tiene, lo cual fue muy fácil. Terminé haciendo un maquillaje con aerógrafo más pesado, que realmente hace que tu piel luzca impecable. Lo hice en dos pasadas: una aplicación más salpicada y luego la segunda aplicación fue más una niebla que suaviza todo. Y luego usé luces, sombras o contornos de una manera muy sutil. Tomaría un color de realce y lo aplicaría para que su cara se viera más redonda y lo haría en la línea de la mandíbula para enfatizar que su línea de la mandíbula no está afilada, que es lo que le sucede a muchas personas cuando envejecen”.
Parte de la magia cinematográfica implicó usar botellas de vino Magnum para hacer que las manos de Fuhrman parecieran más pequeñas, levantar mesas sobre cajas de manzanas en ciertas escenas y, para gran horror de sus 9 compañeros de reparto, usar plataformas muy altas para alterar la perspectiva.
Isabelle también tenía su propio trabajo físico qué hacer. “Sinceramente, creo que la parte más difícil de la transformación fue que tuve que agacharme la mayor parte del tiempo mientras caminaba por el set, lo cual fue lo más divertido, pero no fue tan cómodo” comentó Fuhrman.
Otro de los grandes apoyos fue la intervención de las pequeñas actrices Sadie Lee y Kennedy Rose, quienes fueron utilizadas como extras para las escenas panorámicas de Esther durante gran parte de la película, siendo dirigidas por Fuhrman.
La pieza final del rompecabezas fue que Fuhrman volviera a aprender el acento ugrofinés que había estudiado minuciosamente para la primera película y eso significó reunirse con el entrenador de dialecto Eric Armstrong.
‘Orphan: First Kill’ cuenta como Lena Klammer organiza un brillante plan para escapar del psiquiátrico ruso en el que está recluida y viaja hacia Estados Unidos para hacerse pasar por la hija desaparecida de una familia acaudalada.
Pero la nueva vida de Lena como Esther dará un vuelco inesperado y tendrá que enfrentarse a una madre que está dispuesta a proteger a su familia cueste lo que cueste.