Durante el primer acto de la nueva película ‘Priscilla’, cuando la protagonista titular todavía vive en Alemania con sus padres, usa una cosa casi todos los días: un relicario en forma de corazón atado alrededor de su cuello con una cinta negra. Al principio transmite inocencia. Luego, cuando Elvis Presley la corteja, el collar refleja su enamoramiento: ella discute con sus padres sobre él, garabatea su nombre y le escribe cartas, espera a que la llame.
Ese collar realmente existió. En 1960, a los 14 años, Priscilla Presley lo usó en una fotografía mientras sostenía un disco de Elvis. En sus memorias, ‘Elvis and Me’, la base de la película de Sofia Coppola, Presley escribió sobre un relicario de oro que ella apreciaba y que originalmente le dio a su madre su difunto padre biológico.
Este 2023, el relicario existirá en una nueva forma: Como merchandising oficial de ‘Priscila’ de A24. A24 se ha hecho conocido por vender productos bien diseñados y acordes con el espíritu de la época. Por eso se ha asociado con la marca de joyería fina J. Hannah, con sede en Los Ángeles, para lanzar una romántica y caprichosa réplica de plata (400 dólares) y otra de oro de 14k (1.280 dólares), marcando el debut de A24 dentro de la gama de joyería fina.